Y de repente
el cielo dejo de ser verde esperanza y se tiñó de negro, la noche dejo de ser
calurosa para ser fría como los acontecimiento que desde aquella hora
comenzaron a pasar el último gran maestro y guerrero de esta durísima y larga
batalla fue vencido por el enemigo finalmente colgó sus armaduras y su espada
para afrontar el fatal destino que nos llegaba, con el todo su ejército detrás
nos aferramos a las pocas armaduras que aún quedan puestas en su cuerpo hasta
que solo nos quedo mirar al cielo y sabiendo que desde allí volviendo a retomar
todas sus fuerzas y más, con la ayuda de los que ya estaban allí para recibirlo
poder hacer lo que más quería ser para los demás, y acompañarnos, guiarnos y
cuidarnos a todos los demás corazones que quedamos en este gran ejercito con un
hasta siempre tan profundo y gran como el amor que ha ido sembrando por tu
camino para que recogiéramos sus frutos todos los que en algún momento de su
recorrido le hemos acompañamos y todos
los que se fueron sumando en él y en la batalla y aprendiendo mucho de su
camino y con la esperanza de algún día llegar a tener por lo menos la mitad de
sus virtudes y su fuerzo.
Entonces las
prioridades de la vida cambian todo desaparece y solo nos queda comenzar a
construir un nuevo camino, apoyándonos los unos en los otros y con el impulso y la
tranquilidad de mirar hacia arriba y saber que nos protegerán para siempre.
A ti nuestra
nueva estrella te doy unas gracias tan enormes como todas las muestras de amor,
toda la sabiduría que nos has regalado, todas tus ganas de vivir, toda tu
dedicación a los demás, toda tu esperanza, toda tu fuerza y tu lucha, todos los
caminos de la vida que nos has enseñado y todas las cosas tan grandes y tan
especiales que te hicieron ser lo que eres y sobre todo que tu corazón de
gigante todas esas cosas y las que me dejo por el camino suman un muchísimo que
se queda corto con mis gracias y mi admiración a ti.
Ahora más
flojito y desde lo más profundo de mis adentros te pido una parte de esa fuerza
tuya para que todos nos repongamos y retomemos cuanto antes el camino de esta
cosa extraña que es la vida sobre todo para tu gran dedicación y donde depositabas
la mayor parte del objetivo de tu gran lucha cuyo nombre llevas en tu piel y a
todos los corazón que han surgido gracias al corazón, de forma más especial te
pido que me cuides a mi chiquitico mucho y le hagas ver la forma de con tus
enseñanzas y el legado que nos has dejado hacer grandes cosas, porque con tan
solo eso y el apoyo del resto ese anhelo tuyo se convertirá en el guerrero que
te convertiste tú para afrontarlo todo.
Mi incansable
guerrero voy terminando ya que sabes que tengo muchas cosas que decirte pero de
momento la fuerzas no me dan para más sé tan feliz como nos has hecho siempre a
nosotros y estate tranquilo tu nos has dado el libro, el bolígrafo y las
instrucciones para continuarlo y con tu sonrisa presente siempre seguiremos
escribiendo en él.
A LADO DE MIS DOS GRANDES
ESTRELLAS QUE ESTÁ NOCHE BRILLARAN JUNTAS Y SIEMPRE PARA LO QUE NECESITEIS.
GRACIAS.